Lavar las manzanas y secarlas con papel absorbente.Descorazonarlas con
ayuda de un aparato especial para ello o con un cuchillo fino. Hacer un
corte en la piel en sentido horizontal alrededor.
Mezclar la miel y las pasas en un cuenco y rellenar los huecos de las manzanas. Colocarlas en
una fuente refractaria, regar con el aguardiente y poner una bolita de
mantequilla encima de cada manzana. Introducir en el horno,
precalentado, a temperatura media durante 45 minutos. El tiempo
dependerá en gran medida de la clase de las manzanas y el grado de
madurez de las mismas.