Poner en remojo por separado las judías, el trigo y los garbanzos la noche anterior a la preparación. Colar y lavar las tres cosas. Poner agua en una olla y cuando hierva, incorporar el trigo, dejándolo cocer unos cuarenta minutos.
Incorporar los garbanzos y las judías, poner un poco de sal, tapar y cocer a fuego suave durante unas dos horas. Mientras tanto, pelar la calabaza, quitarle las semillas y cortarla en cubos. Lavar la berenjena, secarla y cortarla en cuadraditos. Escaldar el tomate en agua hirviendo, pelarlo y picarlo muy menudo.
Pelar la patata, lavarla y cortarla en cuadraditos. Pelar la cebolla y picarla finamente. Cuando las legumbres estén casi tiernas, incorporar las berenjenas, continuar la cocción unos diez minutos y agregar la patata y la calabaza. Tapar y continuar cociendo a fuego muy suave. Poner el huevo en un cazo al fuego cubierto con agua y cocerlo durante diez minutos.
Calentar el aceite en una sartén y rehogar la cebolla hasta que esté transparente. Incorporar el tomate picado y dejarlo hasta conseguir un sofrito. Agregar sal, el pimiento y el azafrán, dar unas vueltas y verterlo en el guiso, dejando cocer unos diez minutos. Pelar el huevo y cortarlo en rodajas. Servir el guiso adornado con las rodajas de huevo duro.