Poner la harina en un colador y tamizarla para que quede bien suelta. Separar las yemas de las claras. Colocar las yemas en un cuenco y batir con el azúcar hasta que resulte una mezcla espumosa; añadir el colorante y batir. Incorporar la harina y mezclar muy bien.
Batir las claras a punto de nieve y mezclar con la crema anterior con mucho cuidado para que no se bajen. Cubrir una placa de horno con un papel sulfurizado y untar con la mantequilla (o un silpat). Verter la masa y cocer en horno, previamente calentado a potencia media (170ºC), unos 12 ó 15 minutos o hasta que el bizcocho esté cocido. Desmoldar y enrollar en un paño húmedo. Dejar enfriar.
Desenrollar el bizcocho y rellenar con la nata montada y mezclada con 2/3 de las frambuesas, volviendo a enrollar nuevamente. Dejar en el frigorífico unas 4 ó 5 horas para que se enfrie bien. Finalmente, espolvorear con azúcar glass y decorar con las frambuesas reservadas.